Un avión cohete logra el primer vuelo supersónico civil desde el Concorde

Dawn Aerospace
El sueño de un vuelo supersónico comercial está cada vez más cerca de hacerse realidad. El 12 de noviembre de 2024, el avión autónomo Mk-II Aurora de Dawn Aerospace alcanzó Mach 1,1, rompiendo oficialmente la barrera del sonido.
Desde la retirada del Concorde en 2003, los viajes supersónicos civiles han pasado a la historia. Sin embargo, ha surgido una nueva ola de empresas emergentes que aspiran a construir aviones supersónicos más rápidos, silenciosos y eficientes. El reciente éxito de Dawn Aerospace supone un avance tangible, aunque el vuelo se haya realizado en una nave experimental sin tripulación de 200 kg de peso y 4 m de envergadura.
El Mk-II Aurora bate récords en vuelos supersónicos sobre Nueva Zelanda
Sobrevolando el aeródromo neozelandés de Glentanner, cerca de Aoraki/Mount Cook, el Mk-II Aurora ascendió a 25.150 m alcanzando velocidades supersónicas. Dawn Aerospace informó de que la nave batió múltiples récords, entre ellos el de ser el primer avión supersónico diseñado y construido en Nueva Zelanda y el de ascenso más rápido a 20 km (66.000 pies), completando la ascensión en sólo 118,6 segundos, 4,2 segundos más rápido que un F-15 modificado de los años setenta. Sorprendentemente, el Mk-II Aurora completó un segundo vuelo sólo seis horas después.
De cara al futuro, se espera que el Mk-II Aurora alcance Mach 3,5 y se eleve hasta el borde del espacio a 62 millas (100 km). La empresa prevé que la aeronave sirva para la investigación en microgravedad, la ciencia atmosférica, la observación de la Tierra y los experimentos de vuelo a alta velocidad.
«Este logro demuestra el extraordinario potencial de las aeronaves propulsadas por cohetes», declaró Stefan Powell, Consejero Delegado de Dawn Aerospace. «Con la prueba de vuelo 57, hemos resuelto el último riesgo técnico del programa Aurora: la estabilidad durante la fase transónica. Aurora se confirma ahora como el vehículo de mayor tasa de ascenso de la historia, sentando las bases para que se convierta en el avión más rápido y de mayor altitud del mundo. Este hito es un paso crítico hacia la aviación hipersónica operativa, redefiniendo lo que es posible en la innovación aeroespacial.»
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