Probióticos y declive cognitivo: Los Efectos del Envejecimiento en el Cerebro

Investigaciones recientes destacan el papel crucial del intestino en el mantenimiento de la salud cerebral. Según los resultados del estudio, el uso de probióticos podría mitigar el deterioro cognitivo y de la memoria asociado al envejecimiento. Este avance podría allanar el camino a enfoques innovadores y no invasivos que aprovechen el microbioma intestinal para combatir el deterioro cognitivo en las personas mayores.
Durante el estudio, los participantes con deterioro cognitivo leve experimentaron una mejora en las puntuaciones cognitivas tras una ingesta de tres meses del probiótico Lactobacillus rhamnosus GG (LGG). Esta mejora cognitiva se relacionó con cambios en su microbioma intestinal.
Entusiasmo de un doctorando en microbiología por la salud cognitiva
El doctorando en microbiología de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill y de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, Mashael Aljumaah, se mostró entusiasmado con el hallazgo, que considera una oportunidad para mejorar el rendimiento cognitivo de las personas con deterioro cognitivo leve mediante la modificación del microbioma intestinal con probióticos. El descubrimiento contribuye a comprender mejor la conexión cerebro-intestino y abre posibles vías para abordar el deterioro cognitivo relacionado con la edad”.
El científico, también afiliado a la Universidad Rey Saud de Arabia Saudí, presentó la investigación en NUTRITION 2023, la reunión anual más importante de la Sociedad Americana de Nutrición, celebrada en Boston del 22 al 25 de julio.
Esta investigación, a diferencia de muchos estudios que se centran en enfermedades cognitivas avanzadas como el Alzheimer y la demencia, se centra específicamente en el deterioro cognitivo leve, lo que ofrece la posibilidad de ralentizar o prevenir la progresión a afecciones cognitivas más graves en una fase más temprana.

Investigación del impacto de los probióticos en la salud cognitiva
La investigación contó con 169 participantes de edades comprendidas entre los 52 y los 75 años, clasificados en dos grupos en función de su estado neurológico: los que no tenían problemas neurológicos y los que padecían un deterioro cognitivo leve. Cada grupo se sometió a un ensayo clínico randomizado a doble ciego de tres meses de duración, durante el cual recibieron el probiótico LGG o un placebo. La elección del probiótico LGG se basó en sus posibles beneficios observados en modelos animales en investigaciones anteriores.
Los investigadores evaluaron el microbioma intestinal de los participantes mediante la secuenciación del gen ARNr 16S para identificar y comparar las bacterias presentes en las muestras de heces. Adicionalmente, la secuenciación del genoma completo les permitió conocer el papel funcional de las bacterias identificadas.
Concentración de Prevotella y detección precoz del deterioro cognitivo
Del análisis se desprendió una mayor abundancia relativa de microbios del género Prevotella entre los participantes con deterioro cognitivo leve en comparación con los que no tenían problemas cognitivos. Esta conclusión sugiere que la composición del microbioma intestinal podría ser un indicador precoz del deterioro cognitivo leve, lo que permitiría realizar intervenciones tempranas para ralentizar el deterioro cognitivo.
Los participantes con deterioro cognitivo leve que recibieron probióticos LGG experimentaron una disminución de la abundancia relativa de Prevotella. Este fenómeno se asoció a una mejora de las puntuaciones cognitivas, lo que indica la posibilidad de mejorar la salud cognitiva de las personas mayores mediante la manipulación de la microbiota intestinal.
Perspectiva de Aljumaah
El investigador Mashael Aljumaah destacó el carácter innovador de la identificación de cambios específicos en el microbioma intestinal relacionados con el deterioro cognitivo leve, lo que ofrece vías prometedoras para las estrategias preventivas en materia de salud cognitiva. Si estos hallazgos se corroboran en futuros estudios, centrarse en el microbioma intestinal podría convertirse en un enfoque novedoso para favorecer el bienestar cognitivo.
En conclusión, los investigadores están estudiando los mecanismos precisos por los que microbios como Prevotella influyen en el intestino y mejoran la salud cerebral. En concreto, están estudiando cómo ciertas moléculas producidas por estas bacterias modulan la funcionalidad de las hormonas neuroprotectoras, permitiéndoles atravesar la barrera hematoencefálica.
Referencia: “The Gut Microbiome, Mild Cognitive Impairment, and Probiotics: a Randomized Clinical Trial in Middle-Aged and Older Adults”, por Mashael R. Aljumaah, Andrea M. Azcarate-Peril, Jeffery Roach, John Gunstad y Urja Bhatia, presentado en NUTRITION 2023 el 24 de julio de 2023. (Resumen y detalles de la presentación).
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